El Ulmer Münster, ubicado en el sur de Alemania, es actualmente la iglesia más alta del mundo. Sin embargo, este título podría cambiar en 2025, cuando se complete la “Torre de Jesucristo” de la Basílica de la Sagrada Familia en Barcelona. Una vez finalizada, la torre alcanzará los 172,5 metros de altura, superando por 11 metros al Ulmer Münster, cuya altura es de 161,5 metros.

La construcción de la Sagrada Familia comenzó hace 142 años y se espera que su finalización coincida con el centenario de la muerte de su arquitecto original, el catalán Antoni Gaudí, en 2026. Curiosamente, cuando la iglesia española alcance su altura máxima, será gracias a una cruz de 17 metros de altura fabricada por una empresa alemana.

A pesar de la inminente pérdida del récord, el pastor principal del Ulmer Münster, Torsten Krannich, no se siente molesto por el hecho. “No me parece tan fascinante que sea la torre de iglesia más alta del mundo”, dijo Krannich. “La iglesia también eleva mi espíritu hacia Dios. Es simplemente una iglesia maravillosa que invita a orar y a dar gracias”.

Además, Ulm siempre tendrá un motivo de orgullo adicional: Albert Einstein. El famoso físico nació en la ciudad en 1879 y vivió allí sus primeros 15 meses de vida. Aunque se trasladó con su familia, siempre mantuvo un vínculo con Ulm, visitando la ciudad en 1923, cuando subió a la torre del Ulmer Münster.

Dentro de la iglesia, una de las vidrieras representa a Einstein junto con otros científicos destacados. Ulm, además de su iglesia emblemática, cuenta con una alta concentración de arte y cultura, según Dirk Homburg, jefe de comunicaciones del consejo de turismo de la ciudad. Homburg asegura que Ulm seguirá atrayendo a visitantes, incluso cuando pierda el título de tener la iglesia más alta del mundo. “Podremos inspirar a los turistas, aunque solo tengamos la segunda iglesia más alta del mundo”, afirmó.

El Ulmer Münster tiene una rica historia que data de 1377, cuando los ciudadanos de Ulm decidieron derribar su antigua iglesia parroquial, situada fuera de las murallas de la ciudad, ya que el trayecto hasta allí podía ser peligroso debido a los frecuentes conflictos bélicos de la época. La comunidad optó por financiar la construcción de una nueva iglesia en el centro de la ciudad, con el objetivo de que su torre fuese la más alta del mundo.

Sin embargo, la construcción de la iglesia fue interrumpida en 1543, cuando los líderes de la ciudad, influenciados por la Reforma Protestante y las tensiones políticas y económicas, decidieron detener las obras. La construcción no se reanudó hasta 1844, y finalmente, el 31 de mayo de 1890, la iglesia fue terminada, alcanzando una altura de 161,5 metros, superando al Catedral de Colonia, que tiene 157,2 metros.

Durante la Segunda Guerra Mundial, en 1944, la ciudad de Ulm fue severamente bombardeada, pero, sorprendentemente, el Ulmer Münster se mantuvo en pie. No obstante, debido a su antigüedad, la iglesia requiere constantes trabajos de restauración para reparar los daños causados por el clima y el gran número de visitantes que recibe anualmente.

Actualmente, los visitantes pueden subir 560 escalones hasta una plataforma de observación situada a 102 metros de altura. Sin embargo, la plataforma a 143 metros está cerrada debido a las reparaciones que se están llevando a cabo en las escaleras.

Krannich insiste en que la iglesia sigue siendo especial, independientemente de su altura. “Que la torre sea cinco metros más alta o más baja no cambia la calidad de esta iglesia”, afirmó.

Por su parte, Ursula Heckler, quien ha visitado la iglesia en dos ocasiones, explicó que fue atraída inicialmente a Ulm en 2019 debido a su estatus como la iglesia más alta del mundo. No obstante, dijo que no tiene planes de visitar la Sagrada Familia cuando ésta se convierta en la más alta.

El residente local Christos Kalokerinos también expresó su tranquilidad frente a la pérdida del récord. “Hay muchas otras cosas maravillosas sobre el Münster que hacen que no sea realmente relevante. Creo que la mayoría de la gente piensa lo mismo. Pero, por supuesto, también ha sido genial presumir un poco del hecho de que tenemos la torre de iglesia más alta, porque muchas personas no conocen Ulm por eso”.

Curiosamente, en la ciudad no hay muchas referencias al récord mundial de la iglesia. En la tienda de regalos dentro del Ulmer Münster, solo se encuentra una chimenea falsa con una inscripción que indica que es la “iglesia más alta del mundo”. Además, en una tienda de turismo cercana, la única referencia parece ser una postal que compara la altura del Ulmer Münster con la Gran Pirámide de Giza, el Big Ben y la Estatua de la Libertad, todas ellas más bajas que la iglesia alemana